miércoles, 25 de marzo de 2009

Ante el despido de un trabajador en el Rectorado de la UBA

En la Universidad de Buenos Aires, el Rector Hallu, elegido en forma escandalosa en el marco de acuerdos de cúpulas ajenas a la inmensa mayoría de los trabajadores y estudiantes de la UBA, está llevando hasta las últimas consecuencias el plan de mercantilización de la Universidad. Este objetivo requiere por lo tanto una UBA cada día menos democrática, menos controlada interna y externamente, y más servil ante las empresas y los empresarios. Por supuesto en estrecha alianza con los gobiernos de turno.

Como parte de este objetivo, el plan de disciplinar a los trabajadores y trabajadoras de la UBA está dando pasos crecientes en el ámbito del Rectorado, donde están prontas a ser implementadas nuevas cámaras de video para monitorear los movimientos internos, y la Policía Federal tiene un presencia cada vez más importante en la custodia del edificio. El fantasma de Ottalagano, el rector fascista del gobierno de Isabel Perón, ronda los pasillos del edificio central de Viamonte 470, con el visto bueno de los funcionarios del actual Rector.

El último paso de esta decisión ha sido el despido sin sumario del compañero Campostrini, trabajador de la sección mantenimiento, que había sido recientemente candidato de una lista opositora a la conducción sindical de la burocracia de APUBA. Es decir, ni siquiera se respeta lo que determina la Ley de Asociaciones Sindicales respecto a los seis meses de fueros gremiales para los candidatos de una elección. Pero además, es un despido que se basa en la habilitación legal otorgada por un Convenio Colectivo de Trabajo firmado por la burocracia, lo que demuestra hasta donde llega el acuerdo entre ambos sectores: la patronal y la dirección sindical.

Desde nuestra Corriente Político Sindical “Rompiendo Cadenas” expresamos nuestro repudio ante este hecho, y exigimos su inmediata rectificación por ser contrario al derecho a la estabilidad laboral, y también por ilegítimo, toda vez que en la UBA los principales responsables de la corrupción y los incumplimientos administrativos no se encuentran entre los trabajadores, sino entre los propios funcionarios

Al mismo tiempo, ratificamos nuestra posición en relación a la unidad de todos los agrupamientos que luchan por la democracia sindical como una condición necesaria para el triunfo en ésta y en todas las luchas. Frente a la ofensiva patronal del Rector de la UBA, sólo la unidad de la mayoría de los trabajadores logrará darle una respuesta contundente y efectiva.

Mesa Ampliada de la Corriente Político Sindical “Rompiendo Cadenas”